La ciudad

Detrás de cada esquina, una nueva historia. Un taller de marionetas hechas a mano que te saludan sonriendo, un concierto de algún grupo de jazz que pasaba por allí y aprovecha un escenario olvidado para llenar de vida una calle, una sala sobrecogedora en algún museo que ya no recordabas. Un desfile de payasos. Una conversación profunda. Niños jugando. Un baile improvisado. Un abrazo que lo dice todo. Es muy fácil: sólo tienes que dar un paso más, girar la cabeza y… mirar. Como si vieras ese rincón, esa esquina, esa calle por primera vez. Esta semana hay más rincones que nunca, más historias que nunca, más posibilidades que nunca. Esta semana la ciudad respira.